
Manuel Cuesta Morúa: disidencia, nación y la larga marcha hacia la democracia
En los totalitarismos y en las autocracias la legalidad sirve solo como premisa, exactamente porque ellos viven, se sostienen y sobreviven en una permanente tensión con su propio orden legal y constitucional. Desde él tienes que construir y consolidar entonces un movimiento político que te permita llegar, de la ley a la ley, al pleno Estado de Derecho.

El verdugo en el espejo
La oposición cubana se define por negación del régimen, más que por la construcción propia de un horizonte alternativo. Necesita proyectarse no solo como «lo que no es el castrismo», sino como la semilla de una Cuba democrática. Ello implica, entre otras cosas, construir una estética propia del respeto, cultivar prácticas organizativas que no reproduzcan el verticalismo del régimen, y asumir que sin base social no hay proyecto posible.
¿Cuánto nos importan los presos políticos cubanos?
El dolor de los presos políticos y sus familias, es también el dolor de Cuba. ¿Se puede ser indiferente? El problema es de los cubanos, hay que leer críticamente lo que se ha hecho, examinar escollos, extraer lecciones y apretar el paso. Todo diseño de futuro para Cuba pasa por encarar el tema de los presos políticos y de conciencia: es el aquí y el ahora.