
Renuncia
No se trata de cambiar cargos y nombres; es necesario pasar la página del gobierno inepto y el sistema disfuncional, hacia otro democrático y participativo, en el que el concepto de soberanía sea el ejercicio del mando por el pueblo. Y el soberano, lo sabemos, no delega sus atribuciones.

Cuba: estalinismo y partido único
El dogma estalinista del partido único, y la extirpación de cualesquiera tendencias dentro del mismo, es incompatible con la diversidad de pensamiento e ideas políticas existentes en cualquier sociedad.

Trampas de la gratitud
No es nada ético que desde el poder, sus funcionarios-representantes reclamen constante y machaconamente agradecimiento por algo que ya no existe. ¿Con qué derecho alguien reclama lealtad si los beneficios alcanzados han desaparecido?

El 26 julio de 1953 ¿En qué momento cambió el rumbo?
El discurso oficial posterior a 1959 se distingue por un lenguaje triunfalista y maximalista, mediante el sobredimensionamiento del significado de determinados hechos, elevados a categoría de paradigmáticos no solo para la Historia de Cuba, sino para el continente y aun a escala global.

«El amigo fiel», una visita inconveniente
Las autoridades cubanas no tienen derecho a permitir que las contradicciones interimperiales ruso-norteamericanas escalen al Caribe e involucren al país en provocaciones de esta índole. Es una decisión irresponsable que pone en peligro al propio pueblo cubano.

20 de mayo de 1902, legado y presencia en los cambios de soberanía
Siéntese el gobierno sin prejuicios —antes de con los Estados Unidos, como pretende— frente a la propia ciudadanía cubana, a quienes considera «adversarios».
